Las máscaras de teatro o caras de teatro son generadoras de misterio, risas y drama, haciendo volar la imaginación del público y, al mismo tiempo, logrando tocar sus emociones.
Constituyen un elemento importante en escena (aquí puedes ver más elementos de una obra de teatro), donde el actor tiene la tarea de darle vida a las caretas a través de gestos y movimientos.
Y es que las máscaras teatrales, son parte de los recursos más antiguos del género literario, por ello, hemos dedicado este post para hablar sobre su historia, su uso y cómo hacerlas.
Indice de contenidos
Máscaras de teatro – origen
Las máscaras de teatro griego, fueron las primeras en estrenarse en el siglo V a través de cánticos y danzas en un culto religioso dedicado al Dios del vino y la vegetación, Dionisio.
Los actores atenienses usaban maquillaje para simular máscaras de teatro a color, seleccionando para ello tonalidades entre blanco, gris o marrón, las cuales en principio no tenían expresión.
Con el paso del tiempo, tallaban la madera para elaborar las máscaras, y éstas tenías rasgos más definidos asociados a la tragedia y la comedia.
Durante los actos, los hombres cubrían sus rostros con estas figuras para interpretar a mujeres, dioses, animales u otros personajes en el teatro griego.
Asimismo, los antifaces ayudaban a proyectar la voz, pues en su interior contenían una especie de bocina, la cual hacía que el sonido llegara a todo el público.
Fuera del teatro, las máscaras ya habían sido utilizadas por el hombre primitivo para la caza. Igualmente, se empleaban en otras actividades religiosas desarrolladas en distintas latitudes, como en Egipto, donde las usaban para representar la muerte y resurrección del Dios Osiris.
Sin embargo, su uso se popularizó en el teatro, expendiéndose a otros países. Los artistas romanos se colocaban las caretas en los funerales para representar en escena la vida de los difuntos.
Teatro japonés Noh
Dentro de la historia de las máscaras, encontramos en el teatro japonés Noh, figuras misteriosas, que cambian de expresión, según la cantidad de luz que reciben.
Asimismo, las muecas varían dependiendo de la perspectiva como son vistas. Kan’ami Kiyotsugu y su hijo Zeami, son los autores de este arte lírico que inició en el siglo XIV.
De acuerdo a la creencia de algunos japoneses, las máscaras tienen la capacidad de absorber la energía negativa y deseos impuros de quienes las portan.
Por ello, las familias nobles y de la alta sociedad, optaban por colocar las figuras en la entrada de sus casas con el objetivo de alejar a los malos espíritus.
Las máscaras en la época del renacimiento
Durante la época del renacimiento (ver teatro renacentista) en Europa continental, se retomó el uso de máscaras en los ballets y en las actividades escénicas.
De hecho, la comedia del arte, un tipo de teatro popular, nació en Italia en el siglo XVI e incluyó los antifaces en sus presentaciones.
Si vemos el origen e historia del teatro nos damos cuenta de la influencia que ha tenido la dramaturgia en la clase popular y alta, pues éstos últimos asistían a las reuniones nocturnas con máscaras.
Posteriormente, en el siglo XIX y XX surgieron movimientos artísticos y, con ellos, algunos cambios en el uso de estos objetos.
La máscara de dos caras como símbolo del teatro
Las dos máscaras del teatro constituyen un elemento simbólico en el arte, pues si vemos las imágenes, una ríe, mientras la otra llora.
Estas representaciones fueron inspiradas en dos divinidades de la mitología griega. La primera era Talia, la “Musa de la Comedia”, una joven alegre y risueña dedicada a la música.
Asimismo, Talia llevaba una máscara sonriente y la corona de hiedra, está última significaba la insignia de la inmortalidad.
La otra musa, llamada Melpómene, se caracterizaba por su majestuosidad. Portaba armas y tenía un temperamento fuerte.
Melpómene poseía riquezas y era hermosa, con este atributo físico había poca posibilidad de que los hombres la rechazaran. Sin embargo, se sentía infeliz, representando el drama de la vida.
En este sentido, ambos casos fueron fuente de inspiración para representar la tragedia y la comedia, a través de estos antifaces.
Qué tipos de máscaras de teatro existen
A lo largo de la historia se han añadido distintos tipos de máscara de teatro, cuyos rasgos se han mantenido o evolucionaron con el tiempo.
Por ejemplo, las máscaras de comedia en la Grecia antigua, se caracterizaron por tener una sonrisa burlista, cuya expresión deformaba los gestos de las figuras.
En cambio, las del género de tragedia, mantenían una mueca fija que mostraba desdicha, representando así a mujeres, jóvenes y viejos. Sin embargo, actualmente en el mundo de la dramaturgia se utilizan las siguientes:
- Máscaras neutras: son aquellas que no expresan ningún tipo de gesto.
- Caretas de la Comedia del Arte: exponen medio rostro.
- Máscaras del teatro japonés Noh: existen un gran número de caretas de este tipo, las cuales representan a personas, demonios, ladrones, viejos, fantasmas, entre otros personajes que, dependiendo de la situación, puede causar paz o terror.
- Máscaras de Venecia, Italia: se utilizan para representar temas sexuales en escena. Están hechas de materiales y elementos decorativos como: plumas, pieles, tejidos o piedras. Sus colores varían entre blanco, rojo y negro.
- Máscaras de animales: mayormente son usadas para obras infantiles o en el teatro del absurdo, que carece de lógica.
Cómo hacer una máscara de teatro
Quizá te parezca interesante realizar una máscara de teatro para sorprender a todos en casa, o incluso a tus amigos.
Por eso, compartiremos contigo una serie de videos para enseñarte cómo hacerla, a través de sencillos pasos fáciles de realizar:
Plantillas de máscaras de teatro para imprimir y recortar
Bien, ahora que conoces cuáles son las instrucciones para crear estos objetos de la dramaturgia, queremos obsequiarte divertidas plantillas de máscaras de teatro para imprimir y recortar:
Sin duda alguna, el arte de las caretas ocupa un lugar importante en el teatro, gracias a sus increíbles diseños que despiertan la imaginación del público.
Así que prepárate para imprimir nuestras imágenes, recortarlas, decorarlas y hacer tu propia máscara teatral.
Una respuesta
buen material