Se vende una mula

se vende una mula obra de teatro
Obra de teatro Se vende una mula

Esta divertida obra de teatro cómica de autor anónimo titulada “Se vende una mula” es un sainete que busca ridiculizar algunos vicios y convenciones sociales establecidas. En esta graciosa comedia los personajes llegan al punto de confundir la venta de un animal con un compromiso matrimonial, un guion teatral divertido que ha sido llevado a escena en varios colegios.

Título de la obra: Se vende una mula
Autor: Anónimo

Obra de 5 personajes

Personajes:

  • JUANA: sirvienta
  • LUZ MARÍA: joven hija de Don Pedro
  • DON PEDRO: patrón padre de Luz María
  • ANTONIO: novio de Luz María
  • PANFILO: campesino interesado en comprar la mula

Se vende una mula

 ACTO 1

Escenografía: En la sala de la casa de don Pedro, rico hacendado padre de Luz María, novia de Antonio el cual va a pedir la mano de ella, éste se encuentra con Juana, criada de la casa de don Pedro donde se toma sus “descansitos” y se hace pretensa de Pascual el cual va a comprar la mula.

JUANA: (Entra a escena, barre, baila y bebe de una botella de tequila)

DON PEDRO: (Entra a escena. ) Mmmm… ¿Con qué esas tenemos, eh?

JUANA: (Sobre saltada) Este… Verá usted… Nunca lo hago, pero…

DON PEDRO: Procura que esto no se vuelva a repetir. ¿Entendiste?

JUANA: Si, patrón. ¿No lo volveré hacer?

DON PEDRO: Ahora llama a la niña y dile que quiero hablar con ella.

JUANA: Si, patrón. (gritando) ¡Niña el papá suyo de usté, quiere hablar con usted! (Sale de escena.)

DON PEDRO: Para eso, mejor yo le grito.

 ACTO 2

LUZ MARÍA: (Entra a escena. ) Me dijo Juana que quieres hablar conmigo… ¿Es cierto papá?

DON PEDRO: Así es mija… ¿Te acuerdas de la mula de…?

LUZ MARÍA: Hay papá, ¡Ya vas a empezar con tus indirectas!

DON PEDRO: No mija. Lo que quiero decir, es que la mula que te regaló tu padrino, he decidido venderla.

LUZ MARÍA: ¿Pero por qué?

DON PEDRO: Porque ya está muy vieja y ya no sirve para nada. Además, ya puse un anuncio en el periódico y no habrá de faltar un tonto que quiera comprarla.

LUZ MARÍA: Está bien papá, que le vamos a hacer.

DON PERDO: Voy a salir ahorita, tengo que comprar una medicina para la mula, se ha puesto un poco mala, y no quiero que se me muera antes de venderla. ¡Ah! Si viene algún comprador, le dices que no tardo, que si gusta esperarme o que vuelva más tarde. (Sale de escena.)

LUZ MARÍA: Muy bien papá. ¡Juana!… ¡Juana!

 ACTO 3

JUANA: (Entra a escena. ) Diga usté niña.

LUZ MARÍA: Mientras limpias bien el polvo, vas a estar pendiente por si alguien viene a preguntar por la mula, le dices que mi papá no está, que vuelva más tarde.

JUANA: Muy bien niña, pierda usté cuidado, yo voy a estar pendiente. ¿Qué se train estos con la mula…? ¡Tanto que la han hecho trabajar, ya deberían jubilarla!… Aquí a todos
nos hacen trabajar muy duro… Lo bueno que yo me tomo mis descansitos… ¡Que si no!… (Bebe de la botella. Tocan a la puerta. ) De seguro el que toca, es el que viene por la mula, ¡Voy!

 ACTO 4

ANTONIO: (Entra a escena.) ¡Buenas tardes!… ¿Esta es la casa de Don Peter?

JUANA: ¿De quién?

ANTONIO: De Don Pedro.

 ACTO 5

LUZ MARÍA: (Entrando a escena.) ¡Antonio!…

ANTONIO: ¡Luz María!

(se abrazan)

LUZ MARÍA: ¿Cundo llegaste?

ANTONIO: Hoy en la mañana. No quise avisarte para darte una sorpresa.

LUZ MARÍA: Me decías en tu última carta que no tenías dinero para venir a verme.

ANTONIO: Bueno… Es que ahora ya conseguí trabajo y me dieron un adelanto de mi sueldo.

LUZ MARÍA: ¡Que feliz me haces! Eso quiere decir que…

ANTONIO: Que ya no me faltará trabajo, ni dinero. ¡Mi carrera empieza a dar sus frutos!

LUZ MARÍA: Lastima que mi padre no esté ahorita, para presentártelo y darle la noticia.

ANTONIO: ¿Y volverá pronto tu papá?

LUZ MARÍA: Tal vez, ¿Por qué?

ANTONIO: Es que vengo dispuesto a hablar con él… ¡Voy a pedir tu mano!

LUZ MARÍA: ¡Al fin te has decidido!

ANTONIO: ¡Quiero que nos casemos pronto, para irnos a vivir a la capital!

LUZ MARÍA: Si Antonio, pero antes déjame hablar con mi papá, para que no lo tomes por sorpresa. ¿Quieres volver más tarde?

ANTONIO: (Con ternura) Sí… ¡Cómo tú quieras!

LUZ MARÍA: (Saliendo de escena y suspirando, ella le manda un beso. Entra Pascual y le arrebata el beso a Antonio) ¡Antonio!…

PASCUAL: (Entra observando la escena del beso)

ANTONIO: ¡Luz María!… ¡Oiga! ¡Éste era mi beso! (Sale de escena)

 ACTO 6

PÁNFILO: (Observa la botella y las tres copas que está en la mesita)

JUANA: (Entra a escena) ¿Quién es usté?…

PÁNFILO: No me robé nada…

JUANA: Pos nomás porque llegué a tiempo.

PÁNFILO: Soy gente honrada.

JUANA: ¿Quién sabe?

PÁNFILO: Vide la puerta abierta y entré.

JUANA: ¿Qué es lo que quere?

PÁNFILO: Quiero saber en cuanto venden la mula… Sin ofender a naidien.

JUANA: (Molesta) Si se mira en un espejo, a lo mejor se ofende solo… En cuanto a la mula, mi patrón no está ahorita… Si gusta volver más tarde…

PÁNFIILO: (Meloso) ¿Oiga… Uste aquí trabaja?

JUANA: Sí… ¿Por qué?

PÁNFILO: No, por nada… ¿Y qué hace?

JUANA: Pos… Lavo la ropa, hago la comida… Y muchas cosas más.

PÁNFILO: ¿Y cómo se llama?

JUANA: ¡Pus criada!

PÁNFILO: No, usté…

JUANA: (Coqueta) ¿Yo?… Pus me llamo… Juana María Concepción Trinidad González…

PÁNFILO: ¿Nomás?…

JUANA: Sí… Nomás… Y usté, ¿Cómo se llama?

PÁNFILO: Yo me llamo, este… Pos mi nombre está rete feo.

JUANA: No importa, dígame cómo se llama.

PÁNFILO: Me da harta vergüenza decir mi nombre.

JUANA: ¡Cómo se llama por fin!

PÁNFILO: Pos yo me llamo, ¡Pánfilo Pascual!… ¿Verdá que está rete feo?

JUANA: ¡No qué va!…

PÁNFILO: Oiga… ¿Y tiene novio?

JUANA: Pa’qué quere saberlo.

PÁNFILO: Pos yo decía… Si no tiene novio, a lo mejor me ahorro la mercada de la mula… Pos para qué quiero a las dos.

JUANA: (Enojada lo corre a escobazos) ¡Grosero! , lárguese indio ladino. Vuelva cuando esté mi patrón.

(Bebe de la botella y en ese momento entra Don Pedro)

 ACTO 7

DON PEDRO: (Entra a escena mostrando la botella de la purga. ) No pude encontrar purga pa’mulas, pero encontré una pa’caballos… ¡Es más rápida!… ¿Vino alguien a preguntar por mí?

JUANA: Sí, patrón. Vinieron a preguntar por la mula de usté. Pero le dije que volviera más tarde.

DON PEDRO: ¡Qué bueno! Esperaré pa’ver si logro vender por fin esa mula…

(Tocan a la puerta)

JUANA: Pos no tiene que esperar mucho patrón, porque de seguro el que toca es el que viene por ella. ¡Voy!

DON PEDRO: No, deja. Yo abro… Tú ve a hacer las cosas propias de tu sexo.

JUANA: ¡Hay! Patrón. Esas cosas no se hacen en la cocina. (Sale de escena)

 ACTO 8

ANTONIO: ¡Buenas tardes!…

DON PEDRO: Adelante amigo, esta es su casa.

ANTONIO: Gracias… Gracias…

DON PEDRO: Pásele hombre, ¡Estamos en confianza!

ANTONIO: Tal vez ya le informaron el motivo de mi visita.

DON PEDRO: En efecto, así es. Hace un momento me dijeron que usted vino temprano, cuando yo me encontraba comprando unas medicinas para ella…

ANTONIO: ¿Cómo? ¿Acaso se encuentra enferma?

DON PEDRO: No se alarme, amigo. Está un poco delicada, pero no es nada grave… Estos días así se pone, algo peligrosa.

ANTONIO: ¿Peligrosa?… ¡No entiendo!

DON PEDRO: Si, hombre. Que desconoce a uno y le da por tirar pataditas.

ANTONIO: ¿Patadas?… ¡Ha dicho usted, ¿Patadas?!

DON PEDRO: Es muy natural en ella. Además, es bueno que usted lo sepa. Puesto que se va a quedar con ella… ¿No es así?

ANTINIO: Este… ¡Sí, claro! ¡Sí!

DON PEDRO: Pues bien… Tiene que llevarla a pasear al campo, darle de comer alfalfa fresca y avena.

ANTONIO: ¿Alfalfa?… ¿Avena?… ¿Pero está usted loco?

DON PEDRO: ¿Por qué voy a estarlo? Es lo que siempre ha comido. Y si quiere conservarla en buenas condiciones, tendrá que seguir mis instrucciones.

ANTONIO: ¿Pero, eso no es posible? ¿Cómo puede ella comer eso que usted dice?

DON PEDRO: Pues sí, mi amigo… Además, le recomiendo que por lo pronto no la cargue mucho, está un poco débil; me la pidió prestada el sargento del cuartel y se puso a prestársela a todo el regimiento, y me la trajo cansadísima, y con fiebre… ¡Imagínese, usted! Además, le salió algo en la cola y el sargento no se la pudo curar

ANTONIO: (Iracundo) ¡Esto es el colmo! ¡Ya no aguanto más! ¡Yo no quiero nada con ella! Doy por terminado el compromiso. ¡Adiós!… (Sale de escena)

 ACTO 9

DON PEDRO: ¡Bah!… No sé que le pasó a este tipo… ¡En fin, ya caerá otro!

LUZ MARÍA: (Entrando a escena) Papá, me pareció que hablabas con alguien.

DON PEDRO: Si, mija, era uno que quería comprar la mula, de repente se puso medio raro y se fue.

LUZ MARÍA: ¡Lo siento mucho!… Oye, papá, te voy a decir una cosa.

DON PEDRO: Soy todo oídos, mija.

LUZ MARÍA: Desde hace tiempo tengo relaciones amorosas con un muchacho, pero por carta.

DON PEDRO: ¡Ah, pillina! ¿Con que ya tienes novio? Y por qué no me lo avías dicho antes.

LUZ MARÍA: Es que no tenía trabajo y me daba vergüenza confesártelo, pero ya su situación se compuso un poco; ya tiene trabajo de planta y ha venido a verme.

DON PEDRO: Me alegro, eso quiere decir que es un muchacho que sabe abrirse paso en la vida… ¡Igualito que yo!

LUZ MARÍA: Sabes papá, mi novio ya quiere que nos casemos y va a venir para hablar contigo, y pedirte mi mano.

DON PEDRO: Bien, si tú ya estás decidida, que le vamos a hacer. ¿Lo quieres mucho?

LUZ MARÍA: (Suspirando) ¡Sí!… No tiene mucho dinero, pero es un hombre honrado y me quiere bastante, y yo estoy dispuesta a seguirlo hasta donde él quiera.

DON PEDRO: Muy bien pensado, mija. Es el deber de toda buena esposa.

LUZ MARÍA: Bueno, papá, me voy. Así cuando él llegue, tú estarás solo y podrán hablar a gusto. (Sale de escena)

DON PEDRO: (Suspirando) ¡Mi única hija se me casa!… (Agarra la botella y lee la etiqueta)… Ultra rápida… Mmmm… ¡Qué amolada le voy a poner a esa mula!… (Llaman a la puerta, deja la botella en la mesa. Va a abrir)

 ACTO 10

PÁNFILO: (Entrando a escena) Buenas tardes…

DON PEDRO: Adelante… ¿Tú eres el que vienes por ella?

PÁNFILO: Si señor, y espero llegarle al precio.

DON PEDRO. (aparte) Mija me había dicho que era pobre… Pero este está rete jodido… ¡En fin, allá ella!… Y dime, ¿Qué planes tienes pal futuro?

PÁNFILO: Pus verá usté; pienso hacer muchas cosas con ella. Me la voy a llevar pal’ rancho, trabajarla duro, pa’que saque dinero y pague su comida.

DON PEDRO: (Extrañado) ¿De modo que quiere usted que ella trabaje para que saque lo de su comida?

PÁNFILO: ¡Ah y también la mía! Y si no quiere trabajar, le voy a dar su merecido (hace gestos de golpes en la cola).

DON PERDO: ¿Así las tratas a todas?

PÁNFILO: ¡Pior…. Algunas veces las dejo sin comer varios días, pa’que aprendan!

DON PERDO: Pues con ella no se va a poder.

PÁNFILO: ¿Por qué?

DON PEDRO: Porque ella está acostumbra a levantarse a las nueve de la mañana y que le lleven el desayuno a la cama.

PÁNFILO: ¿A la cama?… No me diga que también toma chocolate.

DON PEDRO: ¡Claro! Chocolate y pan fino.

PÁNFILO: Hum… No lo tomo ni yo. Pos conmigo, ella comerá rastrojo, dormirá en el corral y tendrá que levantarse a las cinco de la mañana.

DON PEDRO: (aparte) Pobre de mija, cuanto va a sufrir.

PÁNFILO: Pos por eso quiero cerrar el trato; pa’llevarmela y empezar a domarla.

DON PEDRO: ¿La llevará alguna vez al cine?

PÁNFILO: ¿A poco le gusta el cine?

DON PEDRO: Si Señor, y también le gusta tocar el piano.

PÁNFILO: ¡Voy!… Ya me la imagino tocando…. (Entra a escena Antonio enojado, y lo detiene Don Pedro)

 ACTO 11

DON PEDRO: ¡Un momento!… Con qué derecho entra a mi casa.

ANTONIO: Con el derecho de un hombre ofendido.

DON PERDO: ¿Ofendido?… Si usted fue el que no quiso llevársela.

ANTONIO: ¿Insinúa usted que me la llevara después de lo que me dijo?

DON PEDRO: ¿Y por qué no? , todo tiene su arreglo y debemos aceptarlo… Este hombre si se la piensa llevar…

ANTONIO. ¿Qué… Qué?… ¿Qué usted se la piensa llevar? (Conato de pelea)

PÁNFILO: Este… No le haga caso… Está rete loco… Figúrese usté, dice que ella toca el piano…

ANTONIO: ¡Claro que lo toca y también baila!

PÁNFILO: ¿Ay mamacita!

DON PEDRO: Mija sabe hacer muchas cosas.

PÁNFILO: ¿A poco es hija suya?

DON PEDRO: ¡Sí, señor!

PÁNFILO: ¡¡¡Voy!

 ACTO 12

LUZ MARÍA: (Entrando a escena) ¿Qué sucede, papá?

DON PEDRO: Nada hija, es que…

LUZ MARÍA: ¡Antonio!… ¿Por qué estás enojado?

ANTONIO: Tienes aún el descaro de preguntármelo. Dime, ¿Quién es éste mequetrefe?

PASCUAL: ¿Yo? Yo nos ningún mequetrefe. Yo soy Pánfilo Pascual.

LUZ MARÍA: No sé… ¡Nunca lo he visto en mi vida!

ANTONIO: ¿Y el sargento?

LUZ MARÍA: ¿Cuál sargento?

DON PEDRO: (Comprendiendo la confusión) Mmmm… (a Pánfilo) ¿Usted por quién vino?

PÁNFILO: Por la mula.

DON PEDRO: ¡Ay! Mija, ya se lo que pasó… Hubo una pequeña confusión. (a pánfilo) Yo creí que éste era tu novio mija… (a Antonio) y que éste venía por la mula.

PÁNFILO: ¡Ya! No tuviera tanta suerte.

LUZ MARÍA: (Suspirando) ¡Antonio!…

ANTONIO: ¡Luz María!…

(Se abrazan)

 ACTO 13

JUANA: (Entra a escena sigilosamente y coqueteándole a Pánfilo)

PÁNFILO: (a don Pedro) Aquí entre nos… ¿Puedo venir a visitar a la mucama?

DON PEDRO: ¿A quién?

PÁNFILO: ¡A la criada!

DON PEDRO: ¡Ah! Condenada… Si sólo tienes la cara de inoceente eh… Y es mas, pa’que veas la nobleza de mi estirpe… ¡Hasta te regalo la mula!

PÁNFILO: ¡Gracias señor!

DON PEDRO: Que bueno que todo se arregló… Mija, sirvan las copas pa’ brindar por la felicidad de los niños… ¿Porque se casarán pronto, verdad?

ANTONIO: Es lo que más anhelo, señor (Luz María confunde las botellas y sirve las copas que estuvieron en la mesita. La criada bebe de la botella de tequila)

DON PEDRO: No me digas señor… ¡Dime, papá!

PÁNFILO: Si, Antonio… Si va a ser tu apá, dile apá.

ANTONIO: Está bien, apá (le besa la mano)

LUZ MARÍA. Aquí están las copas… (reparte las copas)

ANTONIO: Gracias mi amor.

PÁNFILO: Gracias niña.

DON PEDRO. Yo no mija… Ya sabes que a mí me salen almos sapos en donde te platiqué… Bueno digan salud.

TODOS: ¡Salud!

ANTONIO: Me quedó un sabor raro en la boca.

PÁNFILO: A mí… Me pareció bueno… Sobre todo, porque es de gorra.

LUZ MARÍA: ¡Ay! ¡Ay, ay…!

DON PEDRO: ¿Qué pasa?

LUZ MARÍA. ¡Ay! Papá. Creo que voy al baño… ¡Ay! (Sale corriendo de escena)

DON PEDRO: ¡Ay! Es que se acordó de sus amistades mijo… Pero de que se casa, se casa.

ANTONIO: ¡Ay, ay…! Ahorita vengo.

DON PEDRO: ¿A dónde vas?

ANTONIO: Voy al baño también… (sale corriendo de escena)

DON PEDRO: Otro que se acordó de sus amistades…

PÁNFILO: ¡Ay, ay, ay…! (Hace una ligera flexión)

DON PEDRO: ¿No me digas que tú también vas al baño?

PÁNFILO: ¡No!… yo no me aguante (salen de escena)

FIN

5 respuestas

  1. Excelente información , gracias por la gratuidad de sus textos., nos ha sido muy util su trabajo al interior de nuestro grupo escolar. Muchas gracias

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