
“Retiro espiritual” es una obra de teatro para niños que refleja los acostumbrados desacuerdos ideológicos entre las distintas corrientes religiosas, para darle un giro al conflicto y mostrar un importante mensaje de respeto, diversidad e inclusión.
En esta dramatización, cada niño representa la personificación de las religiones más conocidas y asisten a una reunión inesperada que organizó la encarnación de “la inclusión”.
Se trata de una obra en la que prevalecen similitudes y discrepancias dogmáticas, pero con un toque divertido para ayudar a los pequeños a comprender un tema tan complejo como la diversidad religiosa.
Título de la obra: Retiro espiritual
Autor: Luigi Álvarez exclusivamente para obrasdeteatrocortas.org
Personajes:
- La inclusión
- El cristianismo
- El hinduismo
- El islamismo
- El budismo
- El judaísmo
- La diversidad
😇 Retiro espiritual: Guion sobre la diversidad religiosa
ACTO 1
Narrador: en medio de un gran salón estaba una pequeña esperando a cinco religiones para comenzar con un importante evento, solo que los invitados fueron citados a la actividad sin informarles la verdadera razón del mismo.
Así, poco a poco, comenzaron a llegar y el primero de ellos en asistir, fue el judaísmo…
– El judaísmo (con voz de autoridad): “Shalom Aleijem”, digo, “la paz sea con vosotros”, para los que no me entienden.
– La diversidad (con total tranquilidad): “Aleijem Shalom”.
– El judaísmo (sorprendido): ¡oh! Con que me encontré con una de mis seguidoras, ¿fuiste tú quién me citó a este lugar?
– La diversidad: en realidad yo no fui quien convocó la reunión, a mí también me invitaron.
– El judaísmo (intrigado): mmmh… Bueno, entonces espero que los demás invitados lleguen pronto, porque hoy es viernes y mañana me toca descanso, ¡sino me voy!
– Narrador: en ese momento, entró el hinduismo al gran salón…
– El hinduismo: “Namaste, Salam alaikum”.
– La diversidad: “wa alaikum as-salaam”.
– El judaísmo (intrigado): ¿y este qué dijo?
– La diversidad (riéndose): él dijo “la paz sea con vosotros”. Es el hinduismo, él representa al sistema religioso de la India.
– El judaísmo (sorprendido y molesto): y ¿cómo para qué nos citaron junto a otra religión? ¡No!, yo mejor me voy a la sinagoga.
– El hinduismo (impactado): ¿cómo osan organizar semejante complot? Yo también me voy con todos mis dioses.
– La diversidad: ¡ya va!, miren, ahí viene la organizadora de la actividad.
Narrador: justo en ese instante, llegó la inclusión acompañada por el islamismo y el cristianismo.
– La inclusión (emocionada): ¡muy buenos días! Bienvenidos a este grato retiro espiritual, para los que ya llegaron, les presento al cristianismo y al islamismo, los más jóvenes entre todos ustedes.
– El cristianismo: la paz sea contigo.
– El islamismo: salam.
– El judaísmo (disgustado): debí haberlo imaginado, esto solo se te pudo ocurrir a ti, como siempre, la inclusión.
– La inclusión: por supuesto, era la única manera de reunirlos a todos para comprendernos mejor, pero veo que falta alguien.
– Narrador: por último, llegó el budismo al salón y saludó con las manos juntas e inclinando un poco la cabeza.
– La inclusión: ¡qué bueno! Ya están todos. Pensé que no vendrías budismo, ya te iba a buscar.
– El budismo: es que me quedé meditando en el camino.
– La inclusión: lo importante es que estamos unidos. Ya les voy a explicar cuál es el motivo de presentarnos hoy aquí.
Narrador: así, en medio de toda la expectativa, la inclusión los invitó a tomar asiento para iniciar la apertura de la actividad.
ACTO 2
– La inclusión: muy bien, los he citado a este encuentro para que tengamos un nuevo comienzo y logren entenderse con los demás.
– El judaísmo (con seguridad): por supuesto que nos vamos a entender, solo hace falta la llegada del mesías y todos conoceremos al único Dios, cuando eso suceda, nos comprenderemos facilito.
– El cristianismo (intrigado): ¿el mesías? Pero si ya llegó y se llama Jesús.
– El islamismo (confundido): ¿Jesús? No vale, actualícense porque el nuevo profeta se llama Mahoma.
– El budismo (meditando): ooohmmm…
– El hinduismo (confundido): ya va, ¿ustedes hablan de un solo Dios o de cuántos? Porque si es de varios yo tengo una lista bien grande con bastantes dioses.
– El cristianismo: por supuesto que hablamos de un único Dios, el Dios padre, creador del cielo y de la tierra.
– El judaísmo: cerquita cristianismo, cerquita, solo que se llama Yahveh.
– El islamismo: otro más que habla sin saber nada. El Dios único existe, pero se llama Alá.
– El budismo (meditando): ooohmmm…
– La inclusión (interrumpiendo): ¡momento! Creo que nos estamos desviando un poco del asunto principal. Por favor siéntense y hagan silencio. Voy a organizar una nueva actividad.
Narrador: mientras todos esperaban en sus asientos, la inclusión escribía en un cuaderno que tenía sobre su escritorio, preparándose para dar las siguientes instrucciones.
ACTO 3
Narrador: luego de una breve pausa, la inclusión concluyó con las nuevas indicaciones.
– La inclusión: ¡listo! Ahora sí, cada uno de ustedes nos dará sus mejores razones para incluir al resto de una manera agradable y sin problemas.
– El judaísmo: a ver, yo les puedo explicar los 10 mandamientos e instruirlos para que sigan mis pasos mientras esperamos la llegada del verdadero mesías.
– El hinduismo: bueno, yo no suelo buscar fieles seguidores, pero siempre hay espacio para un Dios más en mi lista, aunque ustedes no crean en el resto.
– El cristianismo: yo solo quiero que todos se amen los unos a los otros como sugirió Jesús, nuestro salvador. Sean humildes y caritativos, ese es el único camino de la salvación.
– El budismo: yo los invito a meditar y seguir el camino de buda para obtener paz interior e iluminación.
– El islamismo: yo solo creo una cosa, el único Dios es Alá y solo Mahoma es su profeta. El camino está en la oración diaria y la caridad.
– La diversidad: bueno, ahora falto yo.
– El islamismo: y a todas estas, ¿cuál religión eres tú?
– La diversidad: disculpen, no me he presentado, yo soy la diversidad y siempre he sido muy amiga de la inclusión, por eso vine a ayudarla. La verdad es que todos tenemos derecho a pensar diferente, porque si se han dado cuenta, entre sus creencias y diferencias también hay muchas similitudes. Por eso no debemos obligar a nadie a creer en nuestra fe, sino simplemente respetarlos y tratar de comprender su ideología o su cultura. Sencillamente, así funciona la vida, en medio de un mundo lleno de diversidad, lo importante es entender la postura de los demás y respetarla, aunque sea distinta a nuestras propias creencias.
– La inclusión: muchas gracias diversidad. ¿Ahora todos lo comprenden mejor?
– El judaísmo: no lo había observado de esa manera, pero tienen razón, lo importante es el respeto.
– El hinduismo: y la empatía.
– El cristianismo: y la tolerancia.
– El budismo: y encontrar la igualdad entre nuestras diferencias.
– El islamismo: y evitar imponer nuestra manera de pensar.
– La inclusión: ¡por fin! De eso se trata. Ahora vamos a disfrutar de este excelente retiro espiritual, así que cada uno puede orar y meditar a su manera, para compartir su experiencia al finalizar el encuentro.
Narrador: así, todas las religiones pudieron entenderse mejor desde ese momento en adelante, gracias a las importantes palabras de inclusión y diversidad.
FIN